Pablo Larrazábal: con la miel en los labios, pero con muy buenas noticias

Pablo Larrazábal estuvo apunto de conseguir su décima victoria en el DP World Tour. Se llevó la prueba Laurie Canter tras disputar play off de desempate con Dan Brown y el propio Larrazábal.

La verdad, y siendo sinceros con ustedes, el titular iba a ser “Jodidos pero contentos” pero nuestro editor, que tiene un sabio criterio y una gran elegancia, nos ha sugerido un acertado retoque.

No obstante, seguimos pensando que es la expresión que mejor resume lo que sentimos los aficionados españoles tras la disputa del torneo y, especialmente, tras la jornada de hoy. Ha sido un día colosal de golf para los nuestros, pero finalmente, no ha podido ser. Pablo Larrazábal se ha quedado a un golpe de levantar su décimo entorchado en el circuito.

Por cierto, la clasificación del torneo si de algo habla es de igualdad. Tres jugadores llegan líderes empatados al último hoyo y hay que ir a desempate. Pero, además, hay siete jugadores metidos en un pelotón de un golpe. Si ampliamos a dos golpes, nos vamos a doce jugadores. Esto nos demuestra que, ganar en el DP World Tour es complicado. Y tiene mucho mérito. 

Esa es la noticia amarga del día. El resto, son todas magníficas.

Empezando por el propio Pablo Larrazábal (-14), la jornada de golf que nos ha regalado ha sido apasionante hasta el último minuto. Literal. Los que hayan seguido la retransmisión no podrán negar que ha sido más que entretenida. Por cierto, un día más, luciendo un polo de 11:am Golf chulísimo.

El plan de Pablo para el día de hoy, era llegar a los últimos nueve en buena posición para darse alguna oportunidad seria de victoria en los últimos nueve. Y el plan se ejecutó a la perfección y con el resultado pronosticado por el jugador español. De hecho, los dos primeros birdies del día para él llegaron en los hoyos 9 y 10. Nuevo birdie en el hoyo trece y se pone líder en solitario.

Lo cierto es que Pablo ha estado muy bien desde el tee. Únicamente ha fallado calle en el los hoyos 4, 8 y 9. Además, ha estado tremendo con los hierros generándose muchas oportunidades de birdie que no ha podido confirma al estar algo menos fino con el putter. Es importante señalar que, dado que hoy se esperaba mucho viento, los greenes estaban algo más lentos que ayer y se ha notado.

Pablo pudo hacer birdie tranquilamente en el hoyo 4 en donde se quedó su putt de birdie a 13 centímetros del hoyo. Lo mismo ocurrió en el hoyo 6 en donde su putt de birdie se queda 30 centímetros corto. En el hoyo 17 tira un putt para birdie de tres metros y medio que falla dejando la bola a 20 centímetros del hoyo. 

Finalmente, en el 18 llegó el primer bogey del día con un tripateo que condenó a Pablo a la disputa del desempate junto con los británicos Brown y Laurie, quien se alzaría con el triunfo final. Sinceramente, nos cuesta no pensar que, de andar un poquitín más fino con el putt, Larrazábal se hubiese llevado el triunfo y con cierta holgura. 

Llegó el play-off de desempate y la salida de Pablo se fue al agua tras botar en el margen derecho de la calle. Penalidad y a ejecutar el tercer golpe tras droparse. En este momento, pasan dos cosas de manera consecutiva. La primera es que, en la retransmisión, pudimos escuchar a Raúl Quirós, el caddie de Larrazábal, dándole ánimos y convenciéndole de que con un golpe sólido a bandera se podía dejar la bola dada.

Y esa fue la segunda cosa que pasó. Pablo, tras ejecutar el dropaje, pega un golpazo sensacional desde el rough que deja, efectivamente, la bola muy cerca del hoyo. 

Por su parte, Canter cerró el torneo con una salida magnífica al centro de la calle y un segundo golpe que dejó la bola aún más cerca que la de Pablo y cierra el birdie. Impecable.

La colosal noticia es que Pablo Larrazábal vuelve a la senda de la pelea por el triunfo y, como nos decía en el Dubái Desert Classic, quiere volver a verse entre los 50 primeros del tour. Pues bien, tras la prueba que hoy termina, Pablo se situaría en la posición 18 de la Race to Dubái. 

No perdamos de vista que es su segundo corte consecutivo pasado de la temporada tras fallarlo en el Alfred Dunhill de Sudáfrica y en Dubái en el primer Rolex Series de la temporada. 

Pero más allá de rankings, que no hay que perder de vista, la gran noticia es que ha jugado un golf sensacional durante toda la semana y se le ve más que sólido. No hay más que ver los numerosos highlights de Pablo que el Tour ha publicado en sus cuentas de redes sociales. Jugando así, la décima no tardará en caer. Por poquito cae hoy y cómo nos lo hemos pasado viendo jugar a Don Pablo Larrazábal Corominas.